Hay días que sin tener una razón directa o aparente, nos levantamos con un estado de ánimo no deseable o inadecuado, y nos encantaría tener una varita mágica, para que cuando nos demos cuenta de inmediato poder cambiarlo y así elegir qué estado anímico queremos tener.

La varita mágica nos es posible, pero si os puedo facilitar una serie de inputs que si los pones en práctica funcionan.

Como fase previa a todo momento que sintamos que no nos gusta y que estemos experimentando, hay que poner en práctica el ejercicio del diálogo interior y hablar con nosotros mismos para ir liderando con nuestros pensamientos nuestras emociones y con ello nuestro estado anímico.

Ese diálogo interior puede empezar con preguntas poderosas como ¿Qué estoy haciendo para sentirme así? ¿Qué tengo de valor en mí? ¿Qué puedo agradecer en mi vida?
Una vez que ya hemos iniciado y desarrollado este dialogo interior pasamos a la acción, a los inputs, para sentir un cambio anímico.

1. Hacer ejercicio físico, con ellos vamos a liberar endorfinas y oxitocina, que nos va a dar sensación de bienestar de inmediato, así como bloquear los centros del miedo para sentirnos mejor.
2. Mantener conversaciones, al hablar con alguien y poder compartir cómo te sientes, te vas a liberar y sentir mejor puesto que estarás segregando oxitocina. Y cuidar las palabras que utilizamos tanto en nuestro diálogo interior, como en la conversaciones con los demás, las palabras pueden generar cambios hormonales, que cambian nuestro estado de ánimo, por lo que vamos a elegir las palabras que vamos a utilizar.
3. Cambiar el foco, si te sientes mal porque tus pensamientos están poniendo el foco en algo que te hacen sentir mal, cambia el foco, piensa en otra cosa, pon la atención en otra cosa, que te haga sentir bien.